La evolución del juego en la infancia
El juego en la etapa infantil es una actividad creativa, espontánea, natural y placentera motivada por el interés de niños y niñas, es la base para el desarrollo de habilidades y destrezas motoras, cognitivas, sociales y afectivas.
Conforme los van creciendo el juego va evolucionando y perfeccionándose, dependiendo del entorno y de la etapa evolutiva en la que se encuentre. Al nacer el bebé presenta una serie de movimientos involuntarios resultado de estímulos externos, a medida que va creciendo este movimiento va dando paso a movimientos cada vez más coordinados.
Entre el nacimiento y los dos años se presenta el juego funcional o de ejercicio, en el que niños y niñas repiten varias veces una acción por placer, estas acciones las realiza con su propio cuerpo, luego con objetos, por ejemplo tapar y destapar la mamila o sacar y meter objetos de un contenedor. En este rango aparece también el juego de interacción social especialmente con el adulto.
De los dos a los seis años el juego funcional va dando paso al juego simbólico, en el que se simulan situaciones, escenarios o personajes que no están presentes.
Juego simbólico y juego de Reglas
El juego simbólico va evolucionando al juego de reglas, que se manifiesta entre los seis y los doce años, entre estos dos aparece el juego social que es primordial debido a que los intereses del niño se empiezan a desplazar, yendo de la familia a sus iguales, la aceptación de sus compañeros y su papel en el grupo juegan un papel importante en la formación de su propia imagen. En esta etapa va adaptando su comportamiento a la realidad y muestra mucho interés en saber y conocer el mundo que le rodea, interpreta, comprende, crea hipótesis, organiza y estructura la realidad y se establece el razonamiento lógico por lo que es capaz de establecer acuerdos y pautas.
A pesar de que las reglas están presentes desde el juego simbólico, la diferencia entre las reglas de los niños pequeños y los mayores es que los primeros no toman en cuenta las acciones de los demás, el juego es más individual, en cambio, para los más grandes, las acciones de los demás son de gran importancia, ya que se organizan para lograr una meta, por lo tanto, las reglas son importantes y obligatorias, no hay juego sin reglas.
El juego de reglas implica la adquisición de destrezas cognitivas más complejas y desarrolla también importantes destrezas sociales ya que involucra la aceptación de las reglas que implica desarrollar varias habilidades como: la capacidad de dialogar, negociar, resolver conflictos y dificultades, empatía, cooperación, organización, tolerancia a la espera y a la frustración y control.
¿Cuáles son los principales beneficios del juego de reglas?
- Fomenta habilidades de comunicación y desarrolla el lenguaje expresivo.
- Ayuda al desarrollo de la memoria, atención, capacidad de reflexión, pensamiento matemático y la adquisición de nociones de tiempo y espacio.
- Capacidad de elaborar nuevas estrategias mentales, las cuales podrá aplicar en un futuro a otros contextos.
- Desarrollo de la responsabilidad.
- Ayuda al adulto a identificar dificultades en los niños a través de la observación de este tipo de juegos.
- Por medio del juego niños y niñas descubren y comprenden el mundo, se conocen a sí mismos y a los demás, desarrollan la creatividad y la imaginación al mismo tiempo que se divierten.
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Esther Vargas.
